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Blog de Javier Memba

El insolidario

Las legiones perdidas

Archivado en: Cuaderno de lecturas, Jacques Martin, Alix, "Las legiones perdidas"

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            Los bocadillos de los cómics, al igual que los versos, pierden no poca de su gracia con las traducciones. De modo que en mis dos últimas lecturas de las aventuras de Alix -Roma, Roma (2005) y El demonio del faro (2008)-, cuando aprecié cierta merma en la dicha que de ordinario me procura esta colección, la achaqué al francés original de los álbumes, que me traduje sobre la marcha con mis precarios conocimientos de la lengua de Baudelaire.

            Con todo, el júbilo que me ha procurado en estas últimas tardes la lectura de Las legiones perdidas, en la edición numerada del pasado año de NetCom2 editorial -mi ejemplar es el 384/1000-, se ha debido a algo más que a la impecable traducción de Jesús Caso. Tengo la teoría -y ya creo haberla expresado en esta bitácora- de que las series de cómics legendarias, prolongadas más allá de las entregas concebidas por sus autores originales, se ven demediadas de un modo inexorable.

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Publicado el 13 de julio de 2012 a las 17:15.

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Los mejores cuentos estadounidenses

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "Joyas del cuento norteamericano"

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                   Esas lecturas, que aguardaron durante años, parecen llevarme ahora de unas a otras. Tal y como iba en pos de una referencia, de un artículo a otro, de mi queridísima Gran Enciclopedia del Mundo con anterioridad a las enciclopedias electrónicas. Dediqué mi anterior asiento a Conversaciones con Hergé y vengo ahora a dar noticia de Joyas del cuento norteamericano.

                   Original de Numa Sadoul, Conversaciones es un texto canónico en lo que a la tintinofila se refiere, aunque yo tardé más de veinte años en dar cuenta de sus páginas con auténtico deleite. En cuanto a Joyas del cuento norteamericano, la espera fue más larga. Aun siendo uno de los textos más antiguos que atesoro, tardé en leerlo tres décadas largas. Llegó a mi casa en 1968. Era una de esas impagables antologías que ofrecía, como publicaciones aparte sin llegar a ser separatas, Selecciones del Reader's Digest. Mi madre, como lectora asidua de la revista que fue a lo largo de toda su vida, a menudo las compraba Y este Joyas del cuento norteamericano, junto con Los relatos más bellos del mundo, aparecido en 1969 con un prólogo de Pedro Laín Entralgo hoy es uno de mis libros más preciados.

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Publicado el 5 de julio de 2012 a las 16:45.

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Conversaciones con Hergé

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "Conversaciones con Hergé" de Numa Sadoul

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            La lectura de las aventuras de Tintín fue un placer sistemático, prolongado a lo largo de toda mi infancia. Primera liturgia de aquellos domingos, en verdad sagrados, de hace cuarenta y muchos años, daba cuenta de tan entrañables álbumes -pilar de mi tesoro bibliófilo y de mi mitología personal-, en la cama, donde mi madre me llevaba el desayuno. Ésa es la causa de que mi edición de La isla negra (1938) -la segunda española, con pie de imprenta fechado en enero de 1967-, muestre algunas manchas de Tomate Intercasa. Era aquella una delicia, hoy extinguida como casi todas las de entonces, con que la autora de mis días me untaba las rebanadas de pan del desayuno. Si volviera a saborear aquel sencillo manjar, podría ser al universo de mis primeros años algo así como a Marcel Proust la famosa magdalena de Por el camino de Swann (1913).

            Pero es Tintín quien tiene esa capacidad de devolverme a mi paraíso perdido, que no es otro que mi niñez. Benoît Peeters, el segundo tintinófilo al que leí, nos habla en la introducción a Tintín y el mundo de Hergé (1988) de esa infancia infinita que proporciona la idolatría al infatigable reportero de Le petit vingtième. No puedo sino corroborar lo cierto de dicha afirmación.

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Publicado el 27 de junio de 2012 a las 20:15.

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Conduciendo a ciegas de Ray Bradbury

Archivado en: Cuaderno de lecturas, Ray Bradbury, sobre "Conduciendo a ciegas"

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                   Leí Conduciendo a ciegas, una de las últimas antologías de relatos de Ray Bradbury, en septiembre de 1999. Dos años después de la edición estadounidense original. Hace unos días, con motivo de un par de artículos que he publicado tras el fallecimiento del autor, tuve oportunidad de volver sobre las notas  de aquella lectura que tomé en su momento. Son las que reproduzco a continuación.

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Publicado el 18 de junio de 2012 a las 14:00.

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Las memorias de Buñuel

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "Mi último suspiro".

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                   Tan amenas e interesantes como se me antojaban mediados los años 80, cuando mi buen amigo Juan Luis Abad me hablaba de ellas con auténtico placer, di cuenta de las memorias de Buñuel en diciembre de 2001. Su lectura me resultó tan grata como lo fuera en el 87 la de las de Raoul Walsh.

                   Escritas en colaboración con Jean-Claude Carrière, uno de sus últimos guionistas de don Luis, están concebidas sin un orden cronológico estricto. Y en esa cronología fragmentada abundan las digresiones de un autor que en sus primeras páginas confiesa el placer que le causa dejarse llevar por el relato paralelo.

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Publicado el 30 de mayo de 2012 a las 09:45.

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Dos piezas de Barbey d' Aurevilly

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "Las diabólicas", de Jules-Amédée Barbey d’ Aurevilly

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                   Jules-Amédée Barbey d' Aurevilly no es ningún cínico, como creí que era al tener noticia de su estrafalario dandismo con anterioridad al descubrimiento de su obra. Fue un católico que, tras interesarse por el satanismo, volvió a la fe en que le educaron con la intransigencia del converso. Con todo, la lectura de dos de los seis relatos reunidos en Las diabólicas fue una de las que más me conmovieron en diciembre de 1998. De los distintos encantos de estas piezas destacaría su originalidad.

                   Así, El amor más bello de Don Juan es una interesantísima revisión del mítico amante, en este caso representado en la figura de un aristócrata. Ya envejecido, es invitado a una cena por todas las damas a las que sedujo en otros tiempos.

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Publicado el 3 de mayo de 2012 a las 10:00.

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Un relato de Turguéniev

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "Primer amor", de Iván S. Turguéniev.

 

                   Hace unos días, con motivo del asiento dedicado a Perorata del apestado, apuntaba en esta misma bitácora que el amor puede llegar a ser tan miserable como cualquier otra actividad humana. Abundando en esa misma idea, estimo ahora que constatar dicha miseria causa una especial desolación. Porque, así como de la política -la actividad más despreciable que puede ejercer el ser humano sea cual sea el lado del espectro que elija-, los más escépticos no esperamos más que vilezas y mezquindades, al amor -el sentimiento más elevado-, incluso los nihilistas, tendemos a pedirle cierta altura.

                   Dos son los relatos que más me han impresionado a este respecto. Del primero, Un extraño suceso en la vida de Schalken el pintor, del gran Sherindan Le Fanu, ya he tenido oportunidad de escribir en varias ocasiones. Del segundo, Primer amor de Iván S. Turguéniev -acaso mi favorito de la novela decimonónica rusa-, vengo a dar cuenta ahora.

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Publicado el 23 de abril de 2012 a las 05:15.

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"King Ink", mi descubrimiento de Nick Cave

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "King Ink" de Nick Cave

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            Las colecciones de libros que me son más queridas son aquellas que ya estaban en marcha a comienzos de mi experiencia como lector. Destaca entre ellas Espiral, de la Editorial Fundamentos. Mediaban los años 70 cuando en sus distintos números di cuenta de las dos novelas de Leonard Cohen -El juego favorito (1963) y Los hermosos vencidos (1966)- y hace apenas unas horas acabo de concluir la lectura de King Ink, la antología de prosas y canciones de Nick Cave, uno de los textos más densos de la colección.

            Bien es cierto que la entrañable Espiral, al ser básicamente traducciones de canciones -también leí en ella al infausto Sade, pero esa es otra historia- cuenta con el principal impedimento de las traducciones de poesía: la pérdida de la musicalidad. Pero ello no quita para que descubra a sus lectores el universo de los músicos traducidos. El de Nick Cave es uno de los más sombríos de la historia del rock. No es gratis llamar al australiano El crooner de los infiernos. Sus canciones, en King Ink reducidas a algunas de las grabadas con sus bandas The Birthday Party y The Bad Seeds, son tan apesadumbradas como sombrío aparenta ser él.

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Publicado el 17 de abril de 2012 a las 17:00.

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Perorata del apestado

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "Perorata del apestado", de Gesualdo Bufalino.

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            Me consta que el amor puede llegar a ser tan miserable como cualquier otra actividad humana. Sin embargo, aunque el joven siciliano que protagoniza esta hermosa novela -con la que en la primavera del 98 descubrí a Gesualdo Bufalino- tiene todas las papeletas para alumbrar un amor tan mezquino como los que unen a las cortesanas y a sus protectores en las páginas de Balzac, su sentimiento es uno de los más elevados de los que yo he dado cuenta en mi experiencia como lector.

            Ingresado en un hospital para tuberculosos (la Rocca) de la Italia del verano de 1946, el apestado -sublime forma de llamar al tísico- queda prendado de Marta, otra apestada. Estamos pues ante esa belleza enfermiza que va del ideal romántico a las góticas y las anoréxicas de nuestros días. Tan literaria siempre, acaso tuvo su máxima expresión en las bellas muertas de Edgar Allan Poe.

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Publicado el 9 de abril de 2012 a las 21:30.

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El amor en los días de la furia

Archivado en: Cuaderno de lecturas, sobre "El amor en los días de la furia", de Lawrence Ferlinghetti. Beat Generation.

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                   Mi segunda lectura beat tardía de finales del pasado siglo, veinte años después de aquellos primeros textos de Kerouac y Ginsberg, descubiertos con avidez en la colección Star Books a finales de los 70, fue una novela corta de Lawrence Ferlinghetti publicada originalmente en 1988.

                   Según su colofón, la traducción española de El amor en los días de la furia, la ficción a la que me refiero, salió de la imprenta "el catorce de abril de mil novecientos noventa y ocho". Fue llevada allí por Ollero & Ramos y en sus primeras páginas, el asunto me pareció tan previsible como su título heredero de El amor en los tiempos del cólera (1987), de Gabriel García Márquez.

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Publicado el 5 de abril de 2012 a las 01:15.

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Javier Memba

Javier Memba

            Periodista con más de cuarenta años de experiencia –su primer texto apareció en la revista Ozono en 1978-, Javier Memba (Madrid, 1959) fue colaborador habitual del diario EL MUNDO entre junio de 1990 y febrero de 2020. Actualmente lo es en Zenda Libros. Estudioso del cine antiguo, en todos los medios donde ha publicado sus cientos de piezas ha demostrado un decidido interés por cuanto concierne a la gran pantalla. Puede y debe decirse que el setenta por ciento de su actividad literaria viene a dar cuenta de su actividad cinéfila. Ha dado a la estampa La nouvelle vague (2003 y 2009), El cine de terror de la Universal (2004 y 2006), La década de oro de la ciencia-ficción (2005) –edición corregida y aumentada tres años después en La edad de oro de la ciencia ficción-, La serie B (2006), La Hammer (2007) e Historia del cine universal (2008).

 

            Asimismo ha sido guionista de cine, radio y televisión. Como novelista se dio a conocer en títulos como Homenaje a Kid Valencia (1989), Disciplina (1991) o Good-bye, señorita Julia (1993) y ha reunido algunos de sus artículos en Mi adorada Nicole y otras perversiones (2007). Vinilos rock español (2009) fue una evocación nostálgica del rock y de quienes le amaron en España mientras éste se grabó en vinilo. Cuanto sabemos de Bosco Rincón (2010) supuso su regreso a la narrativa tras quince años de ausencia. La nueva era del cine de ciencia-ficción (2011), junto a La edad de oro de la ciencia-ficción, constituye una historia completa del género, aunque ambos textos son de lectura independiente. No halagaron opiniones (2014) fue un recorrido por la literatura maldita, heterodoxa y alucinada. Por su parte, David Lynch, el onirismo de la modernidad (2017), fue un estudio de la filmografía de este cineasta. El cine negro español (2020) es su última publicación hasta la fecha.  

 


 

          

 

Miniatura no disponible

 

Javier Memba en 2009

 

Javier Memba en 1988

 

Javier Memba en 1987

 

1996

 

 

Javier Memba en la librería Shakespeare & Co. de París

 

 

 

 

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Enlaces

-La linterna mágica

-Unas palabras sobre Vida en sombras

-Unas palabras sobre La torre de los siete jorobados

-50 años de la Nouvelle Vague en Días de cine

-David Lynch, el onirismo de la modernidad en Radio 3

-Unas palabras sobre Casablanca en Telemadrid

-Unas palabras sobre Tintín en Cuatro TV

 

 

ALGUNOS ARTÍCULOS:

Malditos, heterodoxos y alucinados de la gran pantalla

Nuevos momentos estelares de la humanidad

Chicas yeyés

Chicas de ayer

Prólogo al nº 4 de la revista "Flamme" de la Universidad de Limoges

Destinos literarios

Sobre La naranja mecánica

Mi tributo al gran Chris Marker

El otro Borau

Bohemia del 89

Unos apuntes sobre las distopías

Elogio de Richard Matheson

En memoria de Bernadette Lafont

Homenaje al gran Jean-Pierre Melville

Los amores de Édith

Unos apuntes sobre La reina Margot

Tributo a Yasujiro Ozu con motivo del 50 aniversario de su fallecimiento

Muere Henry Miller

Unos apuntes sobre dos cintas actuales

Las legendarias chicas de los Stones

Unos apuntes sobre el "peplum"

El cine soviético del deshielo

El operador que nos devolvió el blanco y negro

Más real que Homeland

El cine de la Gran Guerra

Del porno a la pantalla comercial

Formentera cinema

Edward Hopper en estado puro

El cine de terror de los años 70

Mi tributo a Lauren Bacall

Mi tributo a Jean Renoir

Una entrevista a Lee Child

Una entrevista a William McLivanney 

Novelistas japonesas

Treinta años de Malevaje

Las grandes rediciones del cómic franco-belga

El estigma de La campana del infierno

Una reedición de Dalton Trumbo

75 años de un canto a la esperanza

Un siglo de El nacimiento de una nación

60 años de Semilla de maldad

Sobre las adaptaciones de Vicente Aranda

Regreso al futuro, treinta años después 

La otra cabeza de Murnau

Un tributo a las actrices de mi adolescencia

Cineastas españoles en Francia

El primer surrealista

La traba como materia literaria

La ilustración infantil de los años 70

Una exposición sobre la UFA

La musa de John Ford

Los icebergs de Jorge Fin

Un recorrido por los cineastas/novelistas -y viceversa-

Ettore Scola

Mi tributo a Jacques Rivette

Una película a la altura de la novela en que se basa

Mi tributo a James Cagney en el trigésimo aniversario de su fallecimiento

Recordando a Audrey Hepburn

El rey de los mamporros

Una guía clásica de la ciencia ficción

Musas de grandes canciones

Memorias de la España del tebeo

70 años de la revista Tintín

Ediciones JC regresa a sus orígenes

Seis claves para entender a Hergé

La chica del "Drácula" español

La primera princesa de la lejana galaxia

El primer Tintín coloreado

Paloma Chamorro: el fin de "La edad de oro"

Una entrevista a la fotógrafa Vanessa Winship

Una recuperación del Instituto Murnau

Heroínas de la revolución sexual

Muere George A. Romero

Un mito del cine francés

Semblanza de Basilio Martín Patino

Malevaje en la Gran Vía

Entrevista a Benjamin Black

Un circunloquio sobre la provocación

Una nueva aventura de Yeruldelgger

Una dama del crimen se despide

Recordando a Peggy Cummins

Un tributo a las yeyés francesas

La última reina del Technicolor

Recordando a John Gavin

Las referencias de La forma del agua

El Madrid de 1988

La nueva ola checa

Un apunte sobre Nelson Pereira dos Santos

Una simbiosis perfecta

Un maestro del neorrealismo tardío

El inovidable Yellowstone Kelly

Que Dios bendiga a John Ford

Muere Darío Villalba

Los recuerdos sentimentales de Enrique Herreros

Mi tributo a Harlan Ellison

La inglesa que presidió el cine español

La última rubia de Hitchcock

Unos apuntes sobre Neil Simon

Recordando Musicolandia

Una novelista italiana

Recordando a Scott Wilson

Cämilla Lackberg inaugura Getafe Negro

Una conversación entre Läckberg y Silva

El guionista de Dos hombres y un destino

Noir español y hermoso

Noir italiano

Mi tributo al gran Nicholas Roeg

De la Escuela de Barcelona al fantaterror patrio

Recordando a Rosenda Monteros

Unas palabras sobre Andrés Sorel

Farewell to Julia Adams

Corto Maltés vuelve a los quioscos

Un editor veterano

Una entrevista a Wendy Guerra

Continúa el misterio de Leonardo

Los cantos de Maldoror

Un encuentro con Clara Sánchez

Recuerdos de la Feria del Libro

Viajes a la Luna en la ficción

Los pecados de Los cinco

La última copa de Jack Kerouac

Astérix cumple 60 años

Getafe Negro 2019

Un actriz entrañable

Ochenta años de "El sueño eterno"

Sam Spade cumple 90 años

Un western en la España vaciada

Romy Schneider: el triste destino de Sissi

La nínfula maldita

Jean Vigo: el Rimbaud del cine francés

El último vuelo de Lois Lane

Claudio Guerin Hill

Dennis Hopper: El alucinado del Hollywood finisecular

Jean Seberg: la difamada por el FBI

Wener Herzog y la cólera de Dios

Gordad, el gran maese de la heterodoxia cinematográfica

Frances Farmer, la esquizofrénica que halló un inquietante sosiego

El hombre al que gustaba odiar

El gran amor de John Wayne

Iván Zulueta, arrebatado por una imagen efímera

Agnès Varda, entre el feminismo y la memoria

La reina olvidada del noir de los 40

Judy Garland al final del camino de adoquines amarillos

Jonas Mekas, el catalizador del cine independiente estadounidense

El gran Edgar G. Ulmer

La última flapper; la primera it girl

El estigmatizado por Stalin

La controvertida Egeria del Führer

El gran Tod Browning

Una chica de ayer

El niño que perdió su tren eléctrico

La primera chica de Éric Rohmer

El último cadáver bonito

La exnovia de James Dean que no quiso cumplir 40 años

Don Luis Buñuel, "ateo gracias a Dios"

La estrella cuyo fulgor se extinguió en sus depresiones

El gran cara de palo

Sylvia Kristel más allá de Emmanuelle

Roscoe Arbuckle, cuando se acabaron las risas

Laura Antonelli, la reina del softcore que perdió la razón

Nicholas Ray, que nunca volvió a casa

El vuelo más bajo de la princesa Leia Organa

Eloy de la Iglesia y el cine quinqui

Entiérralo con sus botas, su cartuchera y su revólver

La chica sin suerte

Bela Lugosi y la sombría majestuosidad de Drácula

La estrella de triste suerte

La desmesura de Jacques Rivette

Françoise Dorléac

Klaus el loco

Una hippie de los 70

Jean Esustache, entre la Nouvelle Vague y el ascetismo

Nadiuska, un juguete roto

Thea von Harbou

Jesús Franco

David Cronenberg

Sharon Tate, como en un cuento de Sheridan Le Fanu

Un guionista sediento

La reina del fantaterror patrio

Dalton Trumbo y los diez de Hollywood

La primera chica que arrojó una tarta 

El desdichado Hércules contemporáneo

En la tradición familiar

El músico del realismo poético

Otro tributo a la gran Patty Shepard

Elmer Modlin y su extraña familia

Las coproducciones internacionales rodadas en España

Marilyn Monrore y su desesperado último gesto

Un amor más poderosos que la vida

El actor atrapado en sus personajes

Entre el fantasma de su madre y el final del musical

Barbet Schroeder

Amparo Muñoz

Samuel Bronston más alla de Las Rozas

Chantal Akerman

Françoise Hardy 

Un antiguo dogmático

Jane Birkin

Anna Karina, su turbulento amor y el Madison

Sandie Shaw, ya con calzado

El gran Serge Gainsbourg

Entre la niña prodigio y la mujer concienciada

La intérprete de Shakespeare que inspiró a The Rolling Stones

La maleta del capitán Wajda

Val Lewton y su dramatización de la psicología del miedo

La alimaña de Whitechapel

Cristina Galbó

La caravana Donner

Eddie Constantine

Un nuevo curso del tiempo

Rosenda Monteros

Una criatura de la noche

Una carta a Nicolás I

Edison y el 35 mm

Barbara Steele

El felón Esquieu de Floyran acaba con los templarios

Entre Lovecraft y Hitchcock

Tchang Tchong Yen recuerda a Hergé

La musa del ciberpunk

Néstor Majnó

Una leyenda del Madrid finisecular

El rey de la serie B

La primera cosmonauta soviética

Cuando la injuria sucede a la fatalidad

Bajo Ulloa y sus cuentos crueles

La cicerone de los Stones en el infierno 

Nace Toulouse-Lautrec

El París del Charlestón se rinde a Josephine Baker

Nastassja Kinski, la dulce hija del ogro

Un tributo a Sam Peckinpah

La leyenda del London Calling

Fiódor Dostoievski frente al pelotón de fusilamiento

Mi alucinada favorita

El hombre de las mil caras

El 7º de Caballería pierde la gloria

Un recuerdo de Silke

El genocidio camboyano

Peter Bogdanovich

Guy Debord y la sociedad del espectáculo

Un héroe de Iwo Jima 

Lupe Vélez tras el último tequila sunrise

El general Lee

Roman Polanski

Un hampón italoamericano

Jane Fonda en su juventud

Kraken en la Cuesta de Moyano

Josef von Sternberg

The Beatles en The Carvern y en el show de Ed Sullivan

Que la tierra le sea leve a Douglas Trumbull

El último superviviente del hampa de Chicago

Inma de Santis

El Álamo

Una musa insumisa

El malvado Zaroff y un elogio a las revistas pulp

Miles Davis

Un polaco y el amour fou

La Legión extranjera como género literario

Conchita Montenegro

Peter Lorre y su cara de villano

El juez de la horca

Syd Barrett

Kathleen Turner

Una caricatura de la hombría

Eric Clapton

Helga Liné

Butch Cassidy

Carlos Arévalo, un cineasta español

Nace el último bohemio

Pascual García Arano

María Perschy

El Combray de Ingmar Bergman

Carlos Castaneda

Una canción de Neil Young

Un suicida dandi

Hedy Lamarr

Philip K. Dick y sus realidades bastardas

La última mujer fatal

Andréi Tarkovski, otro maldito por la censura soviética

Nace la música de la New Age

"Wie einst" Lili Marleen

Una lectura de Byron en Villa Diodati

Un apostol de la sedición juvenil

Ava en mi ciudad

Rider Haggard

Una entrada para la "Historia universal de la infamia"

La Marguerite Duras cineasta

Gallardo y calavera

El hombre que vendió su alma a Elizabeth Taylor

El crímen de Charlotte Corday

Un elogio entusiasta de la urbe

Un ángel caído

Mary Bradbury teme por su vida

Pierre Étaix y su triste gracia

El mejor verano de los Rolling

María Rosa Salgado y su conmovedora discrección

La valentía de Ramón Acín

Sylvie Vartan

La cruz de Malta de Wim Wenders

La epifanía de Louis Daguerre

Carroll Baker

Marie Laforêt y mi amigo Eloy

Eliseo Reclus atisba su quimera

Patty Pravo

Richard Pryor contra sí mismo

Miroslava, una actriz marcada por la fatalidad

France Gall y el doble sentido

Robert Bresson y el cine puro

La gesta de Alekséi Stajánov

Nace el Rimbaud del Rock & Roll seminal

Dominique Dunne, una filmografía que se quedó en el aire

Un actor vampirizado por un personaje

Tolkien publica El Hobbit

La segunda musa de Godard

John Dos Passos entra en la eternidad

Alain Resnais, el cine de la memoria

Una musa del filme noir

El cadáver de Nancy Spungen en el Chelsea Hotel

La historia de Bobby Driscoll

Un icono del feminismo

Recordando a Tina Aumont

Colgaron a Gilles de Rais

Dario Argento

Nico en el cine

Dylan Thomas en su último trance

Brigitte Helm

Un punkie en la Disney 

Nace Billy el Niño

The Wall

Tennessee Williams

Vivien Leigh

Kazuo Sakamaki salva la vida en Pearl Harbor

El proscrito de la Escuela de Barcelona 

47 hombres de honor

Charlotte Rampling

La incomunicabilità del gran MIchelangelo Antonioni

F. Scott Fitzgerald

Un pilar del cómic estadounidense

Juliet Berto

Erik, el fantasma de la Ópera

Una comedia francesa

Un pesimista alegre

Una mirada indolente a la derrota 

Sender en Casas Viejas

Kipling en su último momento

Los hermanos Marx

Puente sobre aguas turbulentas

Anouk Aimée

Mary Shelley

Quentin Tarantino

Neal Cassady 

Natalie Wood

La heterodoxia de Ermanno Olmi

Fu-Manchú

Stefan Zweig pone fin a sus días

 

 

 

 

 

 

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